Si eres un amante de la cultura japonesa y no puedes resistirte a sus deliciosos y originales dulces, ya no hace falta que cojas un avión para disfrutar de algunos de ellos porque nosotros te lo llevamos a casa en un periquete.
En esta ocasión tenemos una golosina tan bonita que casi te dará pena comértela, si no fuera, claro, porque está deliciosa. Se trata de una golosina con forma de vid, la planta de la uva, así que tiene varios racimos de uvas pequeñitos: una auténtica monada. Pero en cuanto le des el primer mordisco, no podrás parar, porque tiene un sabor muy elaborado, a moscatel, uva y zumo de melón.
Un regalo perfecto para comer en cualquier lugar y momento, que sin duda encantará todos los amantes de la cultura japonesa y a los que no se conforman con cualquier snack.