Un mercadillo es un tesoro. Como una caja de bombones, que diría Forrest Gump. Vale, sí, en la tiendecita tenemos un montón de cosas chulas que son tesoros. Por ejemplo, tenemos casi todo lo comprable que uno puede imaginar (y cosas que no) sobre Harry Potter. Pero lo que no tenemos, y mira que nos hubiera gustado, es lo que se encontró una chica de Gloucester (en Inglaterra, tirando de Londres hacia la izquierda, no tiene pérdida) en una tienda de ésas que dedican lo que venden a la caridad.

La joven vio tres libros de Harry Potter y decidió comprárselos. Muy fan de Harry no debía ser, si a estas alturas no tenía El Cáliz de Fuego, El Príncipe Mestizo ni La Orden del Fenix, la verdad. El caso es que se los llevó por poca pasta: 3 libras cada uno, unos tres euros y medio. Eran algo viejos, pero estaban en buen estado

En fin, si Hayley Malsom (la chica) no sabía muy bien lo que compraba, los que lo vendían deben estar ahora calvos de tanto tirarse del pelo. Porque se trataba de primeras ediciones, y cada una vale unas 60.000 libras. O sea, la joven Hayley es ahora la feliz poseedora de unos 205.000 euros en libros.

Como rentabilidad de inversión, desde luego no está nada mal. Si te da envidia y quieres probar suerte en los mercadillos de cerca de tu casa, hemos encontrado esta guía sobre las primeras ediciones de Harry Potter que valen una pasta.

Y si tienes suerte, ya sabes donde estamos: admitimos bombones, tartas  y Rolex con brillantitos de agradecimiento.

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