Una espectacular taza negra por dentro y por fuera de uno de los videojuegos clásicos más jugados de la historia, el Pac-Man, como un homenaje a las míticas máquinas arcade. Está fabricada en cerámica y cuenta con nada menos que 315 ml de capacidad. 

Y es que si por algo destaca esta taza es por su increíble diseño que protagoniza el videojuego, el propio Pac-Man, al que también conocimos popularmente como comecocos. Al ser la taza completamente negra, sirve como fondo para el laberinto completo de la pantalla del Pac-man, con fantasmas y todo. Dejarás a ojiplático a todo el que invites a tu casa, en especial a los auténticos fans de los videojuegos clásicos.

No puedes dejar escapar esta fantástica taza, un regalo ideal para cualquier fan de Pac-Man, el universo arcade y del retrogaming, o de las tazas tan originales y bien hechas como esta.